Hola, nuevamente gracias por venir, si estás aquí me doy cuenta que sí te gusta leer jejeje. Ahora vamos a terminar esta historia de Carmen, una fan que podrías ser tu, yo, cualquier luismiguelera de las que conocemos y queremos, sí, ya sé que está medio "colgada" esta novelita, pero qué sería de nosotros sin la fantasía embelleciendo nuestras vidas?. Se vale soñar, no?
CAPITULO 5
Carmen llena la tina de espuma aromática y se mete a relajarse y descansar porque ha caminado como loca por horas y nadar la dejó cansada. Se mira en el gran espejo que está en la pared frente a la tina y se sorprende al ver que está sonriendo y no se había dado cuenta de ello. Claro, Luis Miguel es el motivo, media hora después sale de la tina y empieza a arreglarse ceremoniosamente, se alisa el cabello, se maquilla con esmero, se viste despacio, y repasa su aspecto, pantalón, blusa, zapatos altos, accesorios, perfume......revisa el contenido de la pequeña bolsa que llevará al concierto, se la cuelga al hombro y se mira en el espejo de cuerpo entero de su habitación, complacida con su aspecto y satisfecha consigo misma por haber bajado unos kilos en los meses pasados ajusta su cámara digital para que se dispare sola y se toma algunas fotos en varias poses para recordar ése gran día.
Las siete chicas se reúnen en la entrada del Colosseum, todas van guapísimas y se da cuenta que sus nuevas amigas tenían razón, ahí hay luismigueleras de todas partes del mundo, todas platican emocionadísimas como si llevaran años de conocerse, intercambian datos personales y se toman fotos unas a otras. Carmen es una de las afortunadas que consiguió mejores boletos, en este primer concierto tiene fila 4 pero los dos días siguientes estará en fila 3. Por fin llega el momento de entrar y pierde de vista a sus amigas pues cada quién tiene boletos para diferentes lugares, pero Carmen no se siente sola, todas ahí son amigas, todas viven con la misma ilusión en el corazón. El concierto da comienzo y la algarabía es total, todas cantan, gritan "Micky te amoooooo!", sacan fotos, toman videos y se pelean por las anheladas rosas blancas que el Sol les ofrece a las afortunadas de las filas delanteras, Carmen logró acercarse y aunque Luis Miguel la miró y le sonrió, no consigue una rosa, ni consigue darle la mano. Aún así está feliz, vió a Luis Miguel muy de cerca y camina entre nubes cuando va al encuentro de sus amigas.
Todas ríen y reviven los mejores momentos del concierto mientras se dirigen a buscar un restaurante para cenar aunque ya es muy tarde. De las siete, Carmen tiene algunas de las mejores fotos y promete subirlas al Facebook después. Y como la noche no se hizo para dormir en Las Vegas, las siete van de casino en casino divirtiéndose y tomándose mil fotos.
Muy entrada la madrugada regresan al hotel por fin a descansar.
Esa noche Carmen casi no puede dormir. Piensa en Luis Miguel.
-Si supieras Luis, lo mucho que significas para mi! Qué vida la mía, años soñando con alcanzar lo inalcanzable.............pero te amo!
A la mañana siguiente, o mejor dicho el sábado en la tarde Carmen se levanta a las 2 de la tarde muerta de hambre, llama a Mónica a su habitación y no encuentran a las demás. Se reúnen fuera de la habitación de Mónica y se dirigen a buscar dónde comer, envían mensajes a las demás a sus celulares para ubicarlas y reunirse pero les contestan que compraron tickets para un espectáculo al que a Mónica y a Carmen no les interesa asistir, así que quedan de reunirse hasta la noche.
-En qué habitación estará Luis Miguel?---Pregunta Carmen.
-Ni idea, pero seguro es otra torre del hotel, alguna área para millonarios, nosotras estamos en la zona para los pobrecitos jajajajaja
-Si, pero habrá manera de entrar a ésa torre no? pudiera ser que lo divisáramos.
-Imposible, debe estar vigiladísimo, si no por la seguridad de mismo hotel sí por la seguridad del mismo Luismi.
-A dónde vamos enconces?
-Mmmmm, yo quiero conocer el hotel ése que tiene una copia de la efigie egipcia
-Ah, pues vamos!
Sólo pasean un rato porque ambas se levantaron tarde y las horas vuelan.
El segundo concierto fué tan emocionante como el primero, con la diferencia de que ahora Carmen logró ganar una de las pelotas que Luis Miguel repartió entre el público, era negra, con el nombre de Luis Miguel impreso y enorme!, ahora no pudo darle la mano pero iba feliz con la pelota hacia la habitación preguntándose cómo diablos se la iba a llevar a casa y si sería posible desinflarla sin tener que poncharla. Las siete se tomaron fotos con la pelota todas juntas y luego por turnos. Mónica y una de las otras chicas llamada Mercedes habían sido obsequiadas con una rosa blanca de la propia mano de Luis Miguel. Después salieron a cenar y a jugar un poco en las maquinitas de los casinos, la suerte no favoreció a ninguna.
El domingo en la mañana intentaron encontrar la habitación de Luis Miguel, buscaron la zona de habitaciones más costosa y dieron con un pasillo custodiado por dos guardias y supusieron que iban en la dirección correcta pero no las dejaron avanzar más, les dijeron que necesitaban una autorización especial para entrar a ésa área y no les quedó más remedio que retirarse.
Aprovecharon un rato para ir a la alberca y recorrer otros casinos y claro, fotografiarse cientos de veces.
Carmen había reservado su mejor outfit para ése último show, era un vestido azul claro con un brillo sutil y una tela preciosa y suave que tenía en la pechera una aplicación en pedrería muy hermosa. Los tacones altos no eran su fuerte pero se calzó las altas zapatillas con visos azules, volvió a checar su imagen en el espejo en el mismo instante en que Mónica tocaba a su puerta. Carmen era la única que tenía boleto para ése día, Carmen no había podido adquirir uno y las dos chicas que había conocido primero en la recepción se habían regresado a su país ésa mañana.
-Las chicas y yo vamos a ir al Mirage en lo que tu estás en el concierto, cuando salgas me llamas para reunirnos e ir juntas a cenar va?
-Va! Que se diviertan!
-Que te diviertas tu! Qué envidia!
Este tercer concierto es lo máximo para Carmen, Luis Miguel se equivocó en la letra de una canción y soltó la carcajada riéndose de su error y le dijo al público: "no se la saben!" lo que ocasionó la risa general, finalmente Carmen logra tomar una rosa de mano de Luis Miguel quien la mira y le sonríe mientras se la entrega, casi se desmaya cuando este le guiña un ojo, por un momento pensó que las demás fans le arrebatarían su precioso regalo pues todas querían una rosa, pero al parecer eso se respeta, quien la ganó la ganó.
CAPITULO 6
Carmen piensa que no puede sentirse más feliz, camina en una nube y no se fija ni a dónde se dirige, ése hotel es tan grande que cuando se da cuenta ya está perdida y como ya no aguanta los tacones altos se sienta en un pequeño descanso que hay junto a una escultura, se quita las zapatillas y saca el celular para enviarle un mensaje a Mónica, nada, no hay respuesta, intenta llamarla pero la manda al buzón de voz, guarda el celular y se pone a contemplar su rosa largo rato echando a volar la imaginación y reviviendo el momento en que Luis Miguel se la entregó, sonríe para sí, está tan absorta en sus pensamientos que no escucha unos pasos acercándose.
-Te gustó tu flor?
Carmen se sobresalta, levanta la vista y se encuentra con unos ojos verdes que la miran con curiosidad y regocijo.
Luis Miguel!!
Se queda sin habla y sin poder apartar la vista de aquel rostro bronceado enmarcado por un cabello húmedo y con una sonrisa maravillosa dirigida solamente a ella. lleva una ropa diferente y evidentemente acaba de tomar un baño.
Carmen está petrificada y el tiempo parece haberse detenido, Luis Miguel sigue sonriéndole y Carmen recupera al fin el movimiento pero no el habla, se levanta como impulsada por un resorte y se le cae la rosa en su intento de ponerse los zapatos, Luis Miguel la recoge y por segunda vez en ésa noche, se la entrega.
Carmen vuelve a sentir el toque de ésa piel maravillosamente cálida y tartamudea.
-Ggggggggra-gracias!
-Te vi en mis tres conciertos.---Dice haciendo énfasis en la palabra tres.
"Me vió, me vió! Me recuerda!" y se pregunta si las imágenes que Luis Miguel tiene en su mente de ella son gritándole "te amo" a todo volumen y alzándola mano como desesperada con cara de loca de atar y se pone roja como un tomate. Luis Miguel al verla enrojecer se carcajea y Carmen siente morirse al verlo tan encantador.
-Si, vine de México especialmente a verte, quería hacerlo desde hace años.
"Gracias Dios mío, pude hablar sin meter la pata" piensa.
-Pues me siento triplemente complacido. Y te gustó?
-Claro, estuviste maravilloso, como siempre.
Carmen se había imaginado un encuentro con Luis Miguel miles de veces y pensó que cuando sucediera le diría lo mucho que lo admiraba y lo mucho que lo quería y lo feliz que estaba de conocerlo y le pediría un autógrafo y le preguntaría si podía tomarse una foto con él y resulta que no atinaba a hacer nada de eso, sentía temor de que si empezaba a comportarse como una fanática Luis Miguel daría media vuelta y se iría.
-Muchas graciasssss..........
-Carmen.
-Muchas gracias Carmen y.........te quedas más días en Las Vegas?
-No, me voy mañana.
-Mmmmm yo me quedo un poco más. Ya cenaste Carmen?
Qué maravilloso escuchar su nombre en sus labios!
-No, todavía no.
-Te puedo invitar?
"Dios mío, es esto real? Luis Miguel me está invitando a cenar!!!"
-Claro, este.......
-Quieres pasar primero a tu habitación?
-Si-----contesta sonriente
-Bien, te parece si te espero aquí mismo en.........15 minutos?-----pregunta mirando su reloj.
-Perfecto!
Y sin podérselo creer Carmen se dirige casi corriendo a su habitación, donde se cambia los zapatos por unos más cómodos y se pone un pantalón de vestir que había llevado para regresarse a México al día siguiente con una blusa a juego, se retoca el maquillaje y peinado, checa su imagen, deja su flor en agua mirándola con amor y sale disparada hacia el lugar donde quedó de verse con Luis Miguel preguntándose si se lo imaginó o si fué una broma y tal vez ahí estaría sola por horas hasta que se diera cuenta que su príncipe no aparecería.
Pero en lugar de eso llega al lugar y encuentra a un señor alto y de traje que la espera.
-Es usted Carmen?
-Si.
"Ya está, mandó a un guarura con una excusa loca a decirme que siempre no puede verme."
-Me puede acompañar por favor? Luis Miguel la espera ya en el auto, tengo órdenes de llevarla.
-Sí, claro!
"Es verdad, es verdad, voy a cenar con él!!!!"
Después de algunos minutos y de sentirse muy rara siento escoltada por primera vez en su vida por un guarura Carmen llega a un estacionamiento en donde dentro de una camioneta grande, negra y de vidrios obscuros aguarda Luis Miguel muy sonriente. Sube al carro muy nerviosa y el chofer la mira por el retrovisor, el guarura se sienta en la parte delantera en el asiento del copiloto. Al parecer Luis Miguel ya tiene avisado a dónde van a ir porque sin esperar ninguna indicación de su parte el chofer enciende la camioneta y salen a las iluminadas calles.
-Te parece si cenamos en un lugar tranquilo donde podamos conversar y luego vemos a dónde se nos ocurre ir?
-Sí, está bien. Siempre cenas así de tarde?
-Si, porque no puedo cenar antes del concierto pues no podría cantar, quieres que me pase lo que a Justin Bieber? jajajajaja
-Jajajajaja no!
Carmen se siente como una tonta sin saber qué hacer con las manos o qué platicar pero afortunadamente Luis Miguel está acostumbrado a que las mujeres se queden mudas en su presencia y es él quien dirige la plática. Es muy diferente a como Carmen se había imaginado. No es para nada introvertido o presumido. Sonríe con franqueza y es muy, muy, muy simpático, la mantiene risa y risa todo el camino y Carmen se da cuenta que tanto el chofer como el guardaespaldas se van riendo de sus ocurrencias con discreción.
Llegan a un edificio hermoso y entran a un estacionamiento techado, bajan del auto, y suben a un elevador que los lleva a un piso alto. Al salir del elevador se da cuenta que están en un piso dedicado por entero a un restaurante que tiene una vista maravillosa de Las Vegas y son conducidos a una terraza sin techo en donde hay pocas mesas con sillas negras muy cómodas, hay poca gente ahí y el ambiente es íntimo y romántico, hay un músico sentado al piano amenizando el lugar.
Carmen se pregunta si es uno de ésos lugares en donde no entiendes nada del menú porque son platillos de los que no has oído nunca.
Entre bocado y bocado platican.
-Así que eres de México?
-Si, vivo en Guadalajara.
-Mi hermano vivió ahí.
-Si, lo sé. Me tocó verte cantar ahí hace muchos años.
-Trabajas?
-Si, en una boutique de un centro comercial grande.
-Y te gusta tu trabajo?
-Mmmm, bueno, me gusta el trato con la gente, pero mostrar y vender ropa no es algo que me haga sentir realizada, verdad? Además tenemos un jefe que mejor ni te cuento.
-Por qué, es antipático?
-Antipático es poco jajaja
-Y por qué no buscas otro trabajo? Estudiaste alguna carrera?
-Si, estudié administración pero no sé ni por qué lo hice, en realidad el trabajo de oficina no es lo mío.
-Entonces, en qué te gustaría trabajar?
-No sé, pero hay trabajos divertidos donde no es un sacrificio ir, pienso por ejemplo en toda la gente que trabaja en un acuario, cuidando animales o incluso en una especie de museo, siendo guía de los visitantes y compartiéndoles tus conocimientos sobre ciertos hechos de nuestra historia, así tratas con la gente y al mismo tiempo que enseñas, aprendes, porque el trato con la gente siempre te deja enseñanzas.
Poco a poco Carmen se va relajando y al final de la cena se siente tan cómoda con él que hasta se siente otra persona. A una seña de Luis Miguel el guarura que se había mantenido junto al chofer apartados de donde estaban ellos se acerca y los acompaña a la salida. Luis Miguel le dice que pueden retirarse y que él los llamará cuando quiera que vayan a recogerlos. El guarura lo mira sorprendido como sin poder creer lo que está oyendo, pero una orden es una orden y sin argumentar nada se retira.
-Caminamos?
-Si?
Recorren algunas cuadras comentando lo bonita que es ésa ciudad y las muchas diversiones que ofrece, entran a un casino a jugar un rato, no se van a las mesas de apuestas sino a las maquinitas y ambos pierden estrepitosamente. Carmen se pregunta cómo no han reconocido a Luis Miguel las personas que lo rodean, aunque en realidad muchas mujeres se le han quedado viendo con cara de "Es o se parece?" Un rato después suena el móvil de Luis Miguel y por la plática Carmen supone que es su mánager o alguien de su staff.
-Si, no te preocupes, estaré bien.......no, no lo necesito.....no insistas, luego te cuento.....no.......ok....si, les llamo luego, bye.
Pasan una velada maravillosa riendo y platicando sin parar, Carmen se anima a pedirle a Luis Miguel que si se pueden tomar una foto en un lugar donde hay unas fuentes preciosas y queda feliz pues la foto queda magnifica.
Casi a las seis de la mañana Luis Miguel llama por fin a su chofer y minutos después ya van en la camioneta rumbo al hotel, Luis Miguel insiste en llevarla hasta su habitación y le hace una seña a su guarura de que lo espere al inicio del pasillo en el que se encuentra la habitación de Carmen. Cuando llegan a la puerta Carmen saca su llave y abre. Voltea a mirarlo sin saber qué decirle para despedirse pues es el momento de que acabe ése hermosísimo sueño y sabe que no volverá a verlo más, quisiera jalarlo del cuello y meterlo en su habitación pero sabe que no se atreverá a hacerlo. Luis Miguel la siente dudar y se acerca a ella...........se acerca mucho.......la mira fijamente a los ojos y baja la mirada a sus labios, Carmen siente que su corazón corre a mil kilómetros por hora. Luis Miguel la toma por la cintura la acerca más a sí y la besa. Qué sensación tan maravillosa! Carmen se arrepiente de no haber salido con cien hombres antes para ser una experta besadora y que Luis Miguel encontrara sus besos inolvidables como ella encontraba los suyos. Luis Miguel la aprisiona contra la pared del pasillo y continúa besándola en un beso laaaaaaaaaargo y delicioso, minutos después se separa, le sonríe y le dice:
-Quería besarte desde que te vi la primera vez.
-Pues hemos estado juntos toda la noche y déjame decirte que te tardaste.
-Jajajajajajaja, oye, de verdad tienes que irte mañana?
-Mi permiso termina mañana lunes, el martes tengo que presentarme a trabajar.
-Y......y si faltas?
-Pues me corren, pero además no podría quedarme, no me queda ni un dólar y me sería imposible pagar otra noche de hotel, el boleto de avión lo compré en oferta y no puede cambiarse de fecha, lo perdería y tendría que regresarme a pié a Guadalajara o vender un riñón para poder comprar otro boleto para regresarme, además no traigo más ropa, o sea, por ningún lado puedo quedarme.
-Y si te digo que el dinero no es problema la ropa tampoco, te quedas?........conmigo?
"Esto no puede ser verdad, me lo estoy imaginando!"
Es la oportunidad por la que ha esperado toda su vida así que:
-Si, me quedo.
CAPITULO 7
-QUE QUÉ???
-Jajajajaja, como lo oyes, que me quedo en Las Vegas, Mary, ya tendré tiempo de llamarte o escribirte un email contándote todo, no tengo mucho tiempo, debo colgar porque ya nos vamos, Mary, soy la persona más feliz del planeta, conocí a Luis Miguel, me invitó a salir y me ha invitado a irme con él de viaje y sabes qué? Me voy, no me importa el futuro, no sé qué me depare, pero sea lo que sea, no voy a dejar ir esta oportunidad. Me voy Mary, cuídate mucho!!
-Pero cuént.....Carmen?.........
-Bip bip bip
Carmen había pasado dos días más en Las Vegas junto a Luis Miguel y este le había propuesto que se fuera de viaje con él, le dijo "Carmen, me encantas, me siento feliz y en confianza contigo, me gusta cómo eres, me gusta mucho y sé que te pido una locura, que dejes tu trabajo, tu familia y tu mundo para irte a la aventura, pero en serio, quisiera que te vinieras conmigo"
Carmen corre para alcanzar a Luis Miguel quien la espera en las escaleras para abordar su avión privado, sabe que es una locura, sabe que esto no tiene futuro, sabe que las novias a Luis Miguel le duran cuando mucho dos años, pero no le importa, si esto dura un mes, seis, un año o dos, los va a vivir plenamente feliz, disfrutando cada segundo a su lado. Y sabiendo que no se arrepentirá jamás pase lo que pase, toma su mano mirándolo con su mejor sonrisa y juntos abordan el avión.
FIN
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